martes, 30 de septiembre de 2008

U.H. pregunta: ¿Ha sorprendido el PNV designando de nuevo a Ibarretxe como candidato a "lehendakari"?

Desde mi renglón (con solo 80 palabras) respondo:


No toca sorprenderse


Sorprenderse es libre. Para no hacerlo ingenuamente hay que tener en cuenta que los nacionalistas se retroalimenta de fracasos y derrotas. Los usan para cohesionarse en una especie de “moral de guerra” contra quienes están obsesionados son sus opresores. Por tanto, un político que en circunstancias “normales” estaría amortizado por sus fracasos, en clave nacionalista victimista, puede ser un icono valioso. Por tanto si entendemos el mundo en que vivimos y sus claves sociológicas no toca sorprenderse de esta designación.


El rechazo de la Cámara de representantes de EEUU al Plan Bush para salvar la crisis económica, apoyado por los dos candidatos a la Casa Balanca, es un ejemplo de separación de poderes digno de tenerse en cuenta. EEUU, tan criticado por la "progresía" al final resulta ser, en muchas cosas, modelo a seguir.


Montesquieu ha muerto

¡Viva Montesquieu!


Charles Louis de Scondat, barón de la Bréde y de Montesquieu , no sé si ha muerto realmente o si todavía vive pero con pésima salud. A mediados del siglo XVIII teorizó; abundando en la tesis de Locke; sobre la separación de poderes; sentando que para garantizar la libertad política del ciudadano, que no es inherente a ningún tipo de gobierno, es necesario poner límites al despotismo de quienes gobiernan. Para ello perfiló los ya clásicos tres poderes: el legislativo, el ejecutivo y el judicial; con cuya división y separación el príncipe, a través del primero (legislativo) promulga las leyes y corrige o deroga las que ya están hechas; por el segundo (ejecutivo) hace la guerra y la paz, envía y recibe embajadores, establece la seguridad y previene las invasiones; y por el tercero (judicial) castiga los crímenes o decide las contiendas de los particulares entre sí o de estos con el Estado. Teoría que ha llegado hasta nuestros días como uno de los principios fundamentales del Estado de derecho. De tal modo que no puede hablarse de Estado de derecho; en serio; sin que esos tres poderes estén verdaderamente separados, no estén en una misma mano. Lo contrario, la concentración de poderes, todo en un puño es propio de la dictadura. Mas esa acumulación de poder se consigue con disimulo, aparentando en todo momento lo contrario. Nunca se deja de hablar de separación de poderes, incluso se puede llegara a acusar de “antipatriotismo” a la oposición si osa denunciar la situación … Pero lo cierto es que si el gobierno puede, de hecho, influir más de lo que debiera en los otros poderes, especialmente en el judicial, la democracia como imperio de la ley enferma gravemente.

Con la concentración de poder se impiden los importantes beneficios para la democracia que tiene su separación; entre los que cabe destacar la capacidad de recuperación del sistema; la superación de la corrupción. Pues ante la corrupción de uno o incluso dos de los poderes del Estado el o los que quedan salvos puede recuperar los demás si son verdaderamente independientes, si no son de hecho lo mismo. Si se corrompieran el legislativo y el judicial el ejecutivo puede disolver las cámaras y convocar elecciones para que salga un nuevo parlamento que pueda hacer leyes sobre los jueces. Si fueran el ejecutivo y el legislativo los que se corrompieran, los jueces pueden salvar la situación aplicando la justicia en contra de los corruptos; si fuera el judicial y el ejecutivo, el legislativo podría legislar y nombrar otro ejecutivo, Con la separación de poderes se evita que se pueda perder todo a la vez.

Nuestra Constitución establece (podría decirse que obviamente) la separación de poderes, como hacen todas las constituciones democráticas. Mas los intentos de controlarlo todo han sido una tentación disimulada que pone en entredicho el sistema, especialmente cuando es el poder judicial el que se intenta controlar; porque el legislativo y el ejecutivo, aunque separados formalmente, su conexión es obvia, pues gobierna la mayoría parlamentaria, aunque también es cierto que puede llegarse, aunque más teórica que prácticamente a la moción de censura. Donde la separación de poderes adquiere una necesidad imperiosa, fuerte, es con poder judicial. Sin poder judicial independiente la democracia real es imposible. La formal o aparente puede ir tirando, disimulando más o menos. Pero llega a la quiebra. En nuestra democracia siempre sale un CGPJ que, más o menos, satisface al gobierno de turno. Es impensable un gobierno del poder judicial que disguste al ejecutivo…

Alfonso Guerra, durante la primera legislatura socialista, ya anunció, desde el cinismo ocurrente que le caracterizó, la muerte de Montesquieu. Así, tal cual. Pero no para decir “Montesquieu” ha muerto ¡Viva Montesquieu!, sino alardeando, atribuyéndose la victoria… De haber acabado con Montesquieu y lo que significa. Aunque más bien era una fanfarronada. Mas vale, sin duda, que Montesquieu solo esté enfermo, pero que tenga cura, porque si fuera verdad que ha muerto, poco podríamos esperar de la justicia, y todavía esperamos. Necesitamos esperar.


sábado, 27 de septiembre de 2008


"Una injusticia a uno es una amenaza a todos"

Montesquieu
(En efigie, en un rincón del centro de París)

viernes, 26 de septiembre de 2008

Si cliquea ahí debajo podrá ver y escuchar una sorprendente comparecencia de la Ministra Magdalena Álvarez,que como verán es de una elocuencia descriptible. Véalo y escuchelo:

YouTube - Magdalena Álvarez - al descubierto - accidente Barajas 29-8-2008

miércoles, 24 de septiembre de 2008



U.H. pregunta: ¿Deben reconocer los jueces el derecho a objetar la asignatura Educación para la Ciudadanía?

Desde mi renglón (sólo con 80 palabras) respondo:


Un derecho fundamental


Los jueces deben reconocer la objeción de conciencia como un derecho fundamental en un estado democrático asentado sobre el pluralismo político como valor superior. No debe existir una doctrina oficial. Y al parecer la EpC quiere serlo. Aunque disimuladamente y culpando siempre a los demás. Los que la padecimos, en su día, sabemos bien de qué hablamos. No porque ahora sea adoctrinamiento en otra dirección va a ser bueno… No es la dirección en sí lo malo, sino el adoctrinamiento.


UH pregunta: ¿Se equivoca el Gobierno vasco al afirmar que la sentencia del Tribunal Supremo que ilegaliza a ANV obedece a una aplicación interesada de la ley de Partidos Políticos?

Desde mi renglón

(Con solo 80mpalabras) respondo:

A veces desbarran

El interés jurídico es legítimo. Que no es lo mismo que aplicar interesadamente la ley. Tiene que quedar claro. Con las palabras se pueden hacer muchas cosas; encender pólvora y aplacar ánimos. ¿Dónde queremos estar? El partido que sustenta el gobierno vasco tiene los mismos objetivos políticos, aunque no los métodos; obviamente; que los grupos terroristas vascos. Quizás por eso a veces desbarran. No dándose cuenta por la obcecación que muestran que algunos planteamientos no son solo erróneos sino absurdos.

UH pregunta: ¿Deben elegir los partidos políticos a los miembros del Consejo General del Poder Judicial?

Desde mi renglón

(Con solo 80 palabras) respondo:

Reparto del poder…

Lo que puede ser bueno en algunos lugares en otros no lo es. Aquí es malo por la falta de seriedad de los partidos, que más bien se repartes el poder judicial, llegando al punto de falsear los genuinos fines de la institución; que en el caso del Consejo General del Poder judicial es la constitución de un órgano que detente un poder independiente del estado, para que la democracia tenga las tres patas necesarias para gozar de buena salud.

domingo, 14 de septiembre de 2008

Ultima Hora (Tres en raya) pregunta: ¿Se merece el juez del "caso Mari Luz" una sanción más severa que una multa de 1.500 euros?

En mi renglón respondo

(Con solo 80 palabras)

La cabeza del reo

Antonio Verd Noguera.

Cuando la lenidad es la norma, piénsese en De Juana-Chaos, (ocho meses de cárcel por cada asesinato) es difícil justificar mayores penas para casos menos graves. Cuando se pierde el sentido de la proporción, la justicia pierde la racionalidad que la cualifica… Entra en la senda de la arbitrariedad. Pero tampoco hay que olvidar que cuando el “populacho” reclama justicia, en realidad no reclama tal cosa, sino que pide el ajusticiamiento; la cabeza del reo para arrastrarla por los suelos.

miércoles, 10 de septiembre de 2008

El aborto de Zapatero.

(Su punto estrella de la legislatura)

Sobre el aborto, que Zapatero quiere impulsar como medida progresista, vean la página siguiente:

http://sebastianurbina.blogspot.com/2008/09/aborto.html